Xalapa, Veracruz
La Fundación Tortugas Yepez, con el apoyo de investigadores extranjeros, inició la creación de una base de datos, única en el país y posiblemente en el mundo, que permitirá identificar a las tortugas marinas por medio de un patrón irrepetible que tienen en la cabeza, como si se tratara de una huella dactilar, dijo su director, Ricardo Yépez Gerón.
Agregó que, además, dentro de poco se echará a andar un software de foto-identificación, respaldado por el Fondo Ambiental Veracruzano (FAV), para reconocer a las tortugas marinas, conocer su demografía, dispersión, tamaño de población, tasa de supervivencia y los cambios que lleguen a darse en su hábitat.
La organización ha dedicado los últimos 48 años a la investigación y preservación de las tortugas marinas y gracias a los logros obtenidos fue invitada a participar en un foro internacional programado del 23 al 28 del presente mes en Koli, Finlandia, donde presumirán la base de datos y el software de foto-identificación, en busca de una mayor asesoría de expertos internacionales.
Dicho proyecto obtuvo el Premio Estatal en Ecología en 2014 y durante este año pretende fortalecerse para ser uno de los pilares más importantes en la investigación de tortugas marinas en México y en el mundo, dijo el ambientalista.
Explicó las manchas en las cabezas de las tortugas marinas son patrones sin igual que hacen único a cada ejemplar, lo que ayuda a realizar un estudio más amplio sobre estos réptiles que se encuentran en extremado peligro de extinción.
Precisó que la pigmentación en las cabezas de los quelonios simula como una huella dactilar y que por ello es altamente favorable para llevar a cabo este estudio piloto en la nación.
Los ejemplares de tortugas marinas contempladas en la base de datos son aquellas que cada año arriban a las costas mexicanas para anidar y continuar con su ciclo de reproducción.
En las costas veracruzanas las tortugas arriban de marzo a noviembre de cada año para ovopositar amparadas principalmente por grupos voluntarios que durante esa temporada velan para garantizar su conservación y preservación.
La organización realiza labores de vigilancia en 20 kilómetros de playa protegida de la franja costera de El Raudal, del municipio de Nautla; El Laurel, en Vega de Alatorre y una gran parte de Costa Esmeralda, destacó.
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